lunes, 23 de diciembre de 2019

AVIADOR DRO ATERRIZA EN BILBAO PARA CELEBRAR SU 40º ANIVERSARIO



Este último sábado se producía en Bilbao una acción de carácter ineludible dentro de la programación de Tracking, esas jornadas sobre cultura digital que organizan desde hace siete años el colectivo Caostica y Borja Crespo. Olía, alrededor del Teatro BBK en Gran Vía, a  turbinas  aceleradas, radio, estroncio y subversión, mucha subversión. En el día de la tradición con mayúsculas en la capital vizcaína, el día de Santo Tomás, esa jornada que se repite anualmente y que reivindica el agro vasco en un alarde del acervo baserritarra  uniéndose a la otra gran tradición heredera del cristianismo, el rito navideño, la red de mutantes programados a orillas del Nervión estábamos citados a las 20:00 para participar en un atentado bailable y cultural con el objetivo de reivindicar el futuro que nos han robado.
Al llegar ya estaban allí Biovac N, ArcoIris, ATAT, Genocider F15 y CTA 102. En un primer momento se llevó a cabo una pequeña presentación del que es uno de los libros del año "Aviador Dro, Anarquía Científica" donde se explica la fascinante revolución tecno de uno de los grupos más influyentes en la música española de los últimas cuatro décadas. La obra ofrece una exquisita edición de Patricia Godes y resulta ser un artefacto perfecto lleno de panfletos, cómics, fotografías e diferentes historias de la gran historia de Aviador Dro.
El público estaba impaciente por bailar y lo hicieron desde un principio con la artillería pesada que desplegaron Munlet para abrir válvulas y circuitos electrónicos.
Después aparecieron enfundados en un mono blanco impoluto los robots de Aviador Dro. Imaginería cibernética y actitud punk encima del escenario. Debajo, mucho baile y diversión gracias a temas como Programa en espiral, La Televisión es nutritiva, Selector de frecuencias o Nuclear Sí. Puños en alto, futurismo progresista, llaves inglesas, alimentos radiactivos y espirales volando la sala. Concierto es un termino que se queda muy corto para definir un acción, una performance, un atentado a la tradición y los convencionalismos. Larga vida a los ciborgs, larga vida al mutante, larga vida al Aviador Dro.


mutantes en acción




lunes, 9 de diciembre de 2019

¿QUIÉN ES PINGÜISTAR?

Como sabéis los asiduos a este espacio, soy un amante del electropop al que le encanta descubrir nuevos artistas que habitan en el interesante underground musical. Lo último que ha llegado a mis oídos es el primer disco del bilbaino Txema Urrutia o Pingüistar, tal y como se le conoce en cada vez más pistas de baile. Para el nacido en el barrio de Santutxu este  2019, que está a punto de concluir, ha sido el año de su ascenso meteórico donde ha publicado tres singles con tan buena acogida que le llevó a lanzar el que ha sido su primer álbum bajo el título "Discovery".
Nagore Gore y Richard Maltés han sido sus valedores, también fuente de inspiración y es que sus influencias pivotan entre el dance y el pop de reminiscencias ochenteras y noventeras con fuertes influencias de bandas como OBK, Fangoria y artistas de la talla de Tino Casal, Madonna o Kylie Minogue.
El 2020 se le presenta como un año lleno de oportunidades, proyectos y diferentes actuaciones en las grandes ciudades españolas. De momento y lo más cercano es el bolo que pondrá patas arriba el Key este mismo viernes, así que si estás por Bilbao durante el próximo finde, el plan es más que recomendable.

lunes, 2 de diciembre de 2019

LAS TARDES DÍSCOLAS DE BILBAO

El Key este sábado hasta la bandera repleto de personas muy díscolas

Las tardes en Bilbao ya no son lo mismo, una banda de díscolos y díscolas anda suelta por la ciudad, se organizan a través de las redes sociales para quedar bajo bolas de espejo y preparar saraos de los que, hacía tiempo, no se prodigan por el Botxo. Este sábado la han vuelto armar y  se han reunido en el Key para, la cosa no está del todo clara, reivindicar la diversidad y la libertad a través de la diversión o para divertirse a través de la diversidad y la libertad, tan cuestionadas en los últimos tiempos.
Allí daba igual la edad, la clase social, el género, la raza, la orientación sexual... lo que separe el prejuicio que lo una la pista de baile, cultura de club en estado puro. La música, la danza y el buen rollo son las principales herramientas de las que se valen para luchar contra el sopor y el aburrimiento, tan enraizado a orillas del Nervión. 
Tal y como os cuento, este sábado volvieron a liarla, montaron un tardeo donde se concentraron decenas de personas que abarrotaron el Key. ¿Un tardeo?¿en Bilbao? ¿a la hora del pintxo-pote? Herejes y traidores que eligieron escuchar a  Michael Jackson, Depeche Mode, Corona, Rosalía, Pet Shop Boys, Gloria Gaynor, Fangoria, El Columpio Asesino, Monterrosa... un eclecticismo para sibaritas de lo heterodoxo. 
Y allí, con la premisa de pasarlo bien, con la desfachatez del diferente, de los que son ajenos al convencionalismo idearon un espectáculo para defender el show de Bilbao para Bilbao. Allí esa gran estrella llamada Yogurinha Borova, un engendro creado  a base de brillo y beats, nos hizo sentirnos divinas con sus hitazos electropop y coreos de la gran Raffaella Carrá.  Compartió escenario con la otra gran diva de la tarde, Dudu Ouchen, que interpretó en riguroso directo varios temas soul y disco de reinas  como Donna Summer y Amy Winehouse, aquellas que  marcaron el camino a los y las allí presentes. 
La fiesta asumió como elementos identitarios dulces y golosinas que se regalaban a los asistentes. Dulces como Peta Zetas, simbología de caramelo adoptada por los díscolos clubbers, y pastelitos de "Pantera Rosa" en honor a su creador, que falleció días antes. Era el tributo al inventor de un producto que acabó transformándose en íbero icono pop, todo como muy warholiano. 
Y a medianoche, al igual que le ocurrió a Cenicienta, el hechizo se diluyó, el tardeo llegó a su fin y los asistentes se disolvieron pero el cuento, en este caso, no había terminado. Esto sólo acaba de comenzar. Prometen volver con propuestas y acciones para hacer un Bilbao más bailongo y divertido, para hacer un mundo más colorista y divertido. La lucha continua y se hará bailando. Cuidado porque las díscolas y díscolos pueden estar en cualquier parte.