domingo, 23 de enero de 2022

¿HAY VIDA MÁS ALLÁ DEL REGGAETON?

                                       

El reggaeton sigue siendo la música popular a nivel internacional que más escucha la juventud y esto lleva ocurriendo desde hace ya más de dos décadas. El asunto carece de precedente y sólo el rock puede presumir de un reinado tan extenso aunque con múltiples matices ya que la estética rockera de los años 50 no tenía nada que ver con su evolución durante décadas posteriores y las consiguientes mutaciones en rock sinfónico, rock glam y el hippismo. Pero en el caso del reggaeton pocas o ninguna son las variaciones que se han ido dando de los principios años 2000 respecto a las producciones actuales y esa actitud tan característica muy centrada en la hipersexualización.

Los jóvenes que hace casi dos décadas iban a bailar "Dame más gasolina", "Papi chulo" y demás canciones son hoy los padres de unos adolescentes que siguen enganchados a los mismos ritmos pegajosos y a esas letras tan sexuales, a veces sexistas  y facilonas. En los últimos tiempos sólo el trap está logrando hacer algo de sombra sin desbancar la hegemonía de un género que no quiere irse. El punk, el hippismo, la disco music, el electropop, el bakalao tuvieron su hegemonía en las pistas pero acabaron desapareciendo y perdiendo su título de "sonidos del momento"  por algo tan elemental como el paso de los años y la asunción por parte de los nuevos jóvenes de su propia música, drogas, estéticas o actitudes. Y es que la juventud siempre trae consigo ruptura, el hippy sesentero era viejo para el punkarra de principios de los 80, el que bailaba disco music en los 70 era un carca para los que se dislocaban 10 años después con el acid house pero... ¿no se va a terminar de ir el reggaeton para acabar militando en las filas de la nostalgia?

De momento, todo parece indicar que no. El género se ha englobado en eso que se viene a llamar música urbana, un cajón de sastre donde caben sonidos como el trap, el hip-hop e hibridos que cogen de aquí y de allá, desde la bachata a la rumba, desde el flamenco al pop. Pero donde hay un grueso importante de temas reguetoneros que hacen mantener el sonido en la cresta de la ola entre los jóvenes y no tan jóvenes que continuan con ganas de más baile caliente. ¿Pero se atisba novedades en el horizonte?¿Puede llegar un cambio de ciclo? En diferentes ciudades como París diferentes movimientos con reminiscencias de ciertos setentas van tomando cuerpo entre la juventud más inquieta. Pantalones acampanados y cuerpos flacos, ambiguos, como el de Bowie comienzan a bailar una música que bebe del pop, del glam rock y la música disco e incluso la electrónica en sentido estricto. Veremos que pasará en unos meses venideros donde, después de dos años con restricciones, un mundo demasiado incierto en los socio-político y la irrupción de una generación  que nacieron alrededor del 2005 y cuya vida ha sido una crisis continua. Es el caldo de cultivo perfecto para postulados rupturistas, esperaremos bailando y si es necesario, bailando reggaeton.



1 comentario:

Akrabu dijo...

Yo lo tengo claro. Si el Reggaeton no muere es por su clara actitud sexual, y si hay algo que nunca pasa de moda son las ganas de follar.